DEPARTAMENTO EN PENÍNSULA (memoria descriptiva)
Una de las preocupaciones del GRUPO LBC, conformado por Alfonso López Baz y Javier Calleja, es la de entender desde las primeras reuniones con los clientes, el carácter, la personalidad y sus gustos personales, para poder una vez digerido el programa, llegar a un resultado que haga realidad estas características. Estas consideraciones, se complican aún más, cuando el cliente, es uno de los socios de este GRUPO de arquitectos. Pudiera pensarse que el programa de necesidades esta más claro que muchos otros ejercicios de proyecto, que el gusto es conocido y que los conceptos de estilo de vida, están presentes en la intención, sin embargo jugar los dos papeles, cliente y arquitecto complican el escenario. El concepto general, es el de un Departamento, cuyos espacios se suman de alguna forma, para dar al mismo, la amplitud visual o la intimidad, en algunos casos…..La interacción de estos, es soportada también, por la unión de algunos elementos arquitectónicos (como mamparas corredizas ó persianas verticales de gran dimensión) que ayudan a lograr esos cometidos. El programa es pequeño, dos master – suites con vestidor y baño cada una, una biblioteca modificable a tercer recámara y una estancia comedor, lo completan. Se accede al Departamento por un vestíbulo sereno, en donde las obras de arte, nos dan la bienvenida. Un baño de visitas, con un mueble de características orientales, soporta un lavabo de granito, de una sola pieza. Una celosía horizontal a base de persianas verticales de madera, nos permite adivinar el área social, a la cual se entra por una especie de TORI JAPONES. El piso de granito sandblasteado en grandes losas separadas por entrecalles, integra las áreas de estancia, comedor y biblioteca…..la cromática a base de cálidos grises y rojos quemados, armoniza con maderas naturales de wengue y ébano. La estancia y el comedor combinan , muebles italianos de diversos diseñadores, con arte moderno mexicano y antigüedades del oriente, y se ligan a través de un par de puertas corredizas, a la biblioteca en donde se aprecia una colección de fotografía contemporánea. Los libros han sido organizados a través de un programa de computadora y homogeneizados con una cubierta monocromática, que provoca un efecto “muy especial”. A las master – suites se accede por un pasillo, radial debido a la forma del edificio. Este ha sido utilizado como closet multiuso y sus puertas divididas con cicatrices o cortes de manera arbitraria, que funcionan como jaladeras, una pequeña oficina casera aparece al correr un cuadro sobre dicho pasillo. La primer suite, según el dueño, más que una recámara con libros, es una biblioteca en donde se puede dormir. Libros de arte, arquitectura y literatura, dan marco a pequeñas obras de arte. Una puerta con un cuadro montada, se corre para dar paso al baño, que se integra totalmente de esta manera a la recámara. La suite anexa, tiene básicamente tres áreas, una para echarse a ver la televisión, un área para escribir y de trabajo y otra para dormir, perfectamente separadas y a la vez formando parte de un mismo espacio. Al lado se encuentra un lugar de meditación. Baño y vestidor, se integran en un amplio espacio en donde se aprecia el orden y el rigor en el diseño. Una celosía de madera filtra la luz solar y matiza los colores de este agradable espacio. El experimento total, dos arquitectos, una mezcla de dos historias, la de los dueños y de estilos modernos y de tradición, dieron como resultado un departamento eclectico con mucho sabor.
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